domingo, 6 de marzo de 2011

El Dictador Venezolano Hermano del Extranjero y Enemigo de su Pueblo


Las dictaduras cuando caen dejan ver la inmundicia en la que estaban sostenidas.
- Antonio Semprun -

Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira.


El dictador Libio que por cuarenta y dos años se ha mantenido oprimiendo en forma brutal a su pueblo ve como inexorablemente le llega la hora que más temen estos sátrapas, la expiración de la patente que se auto concedieron para oprimir al pueblo. A pesar de la inminente realidad trata de mantenerse en el poder de forma irracional masacrando a una población que se cansó del abuso y el irrespeto del tirano, a su defensa ha salido su homólogo venezolano quien propuso que una comisión de países del ALBA vaya a Libia para ayudar a solucionar el conflicto que vive ese país.

Expresó que en la nación del norte de África se vive "una guerra civil, que busca petróleo a costa de sangre inocente". Es una lección bien aprendida la que esbozan los dictadores cuando se sienten amenazados, buscan un culpable que cargue con las culpas, mientras se erigen como salvadores de sus pueblos cuando en realidad lo que pretenden es salvar su estadía en el poder.

Muammar Gadaffi ha ordenado bombardear a la población civil, su único propósito es continuar mancillando al pueblo Libio, ordenó el uso de la fuerza de manera irracional para hacer desistir a los ciudadanos que luchen por sus derechos y sus libertades. La misma acción tomo el dictador venezolano el 11 de Abril del año 2002, cuando el pueblo en una demostración de civismo marchó multitudinariamente en forma pacifica por sus derechos y el huésped de Miraflores le ordenó a la Fuerza Armada la implementación del Plan Ávila, en ese momento la sapiencia y la cordura de quienes debían ejecutarlo impidieron una masacre contra la población al desconocer la orden.

Los dictadores al igual que los delincuentes manejan códigos secretos que les permita ayudarse mutuamente, hacen negocios, se cuidan las espaldas, la falta de moral de estos individuos los convierte en personajes de utilería porque su egolatría los hace verse vencedores, mediadores y hasta libertadores cuando son en realidad alfiles en un juego de ajedrez a los que los pueblos llegado el momento y aún a costa de un precio muy alto les da Jaque Mate.

Esos códigos secretos obligaron al dictador venezolano a salir en defensa de su hermano Libio pretendiendo tapar un sol de mediodía con el dedo menique cuando expresó '' a mí no me consta que Gadaffi es un asesino'', a los dictadores jamás les consta lo evidente lo que tienen frente a sus ojos, estos esconden sus dictaduras detrás de revoluciones, como lo ha hecho Gadaffi con su supuesta revolución verde y lo ha hecho el dictador venezolano con su revolución roja, rojita, el fin es el mismo empobrecer los países mientras ellos y sus familias se hacen mil millonarios y viven como reyes disfrutando de privilegios que son inalcanzables para un venezolano de a pie.

A Gadaffi le han congelado cuentas bancarias en Austria, Alemania, Londres, Estados Unidos, Suiza miles de millones de dólares, euros y libras esterlinas producto de la revolución que encabeza en donde el pueblo debe sacrificarse por la revolución y subsistir cada día. Los dictadores deben cuidarse las espaldas entre sí para mantenerse en el poder porque una vez que sus dictaduras se derrumban emergen como icebergs la podredumbre que escondían y los rostros de los cómplices que las apoyaban.

Después del genocidio cometido contra su pueblo, Gadaffi tiene dos opciones una visita permanente a Ala o cambiar su estrafalaria vestimenta de seda por el uniforme que habrá de usar como resultado del veredicto de la Corte Penal Internacional de la Haya, el dictador de Sabaneta debe poner las barbas en remojo, porque la historia no registra a ningún dictador que después de las aberraciones cometidas en el poder haya gozado de respeto, credibilidad, paz o libertad.
El dictador venezolano se apresuró a proponer la creación de una comisión de los países del ALBA que iría a Libia para mediar en el conflicto en el que Gadaffi tiene sumida a Libia, iniciativa que rechazó Said el Islam Gadaffi hijo de Gadaffi sobre la cual afirmó "los venezolanos son nuestros amigos, los respetamos y nos gustan pero están lejos y no tienen ni idea". "Libia está en Medio Oriente y en el norte de África y Venezuela está en América Latina. Gracias, lo agradecemos, son nuestros amigos, es un buen gesto, pero somos capaces de resolver nuestros problemas”.

Mientras se gestionan estas acciones para ayudar a un pueblo que está en el Medio Oriente y en el norte de África, el dictador venezolano se convierte en candil de la calle y oscuridad de su país. NO PERMITE la entrada de una comisión oficial de la OEA a Venezuela para que verifique la violación de los derechos humanos y la existencia de presos políticos a que le teme el régimen si no existen estas violaciones.