domingo, 6 de octubre de 2013


El Colombiano y la Banda que Desangra a Venezuela

La aspiración al poder absoluto es una droga que enferma gravemente a los individuos
                                                       Antonio Semprun
El socialismo del siglo XXI,  es la guarida en la que se reúnen   cada vez mayor cantidad de delincuentes para elaborar planes y poner en práctica los que desde hace  años tenían preparados los Castro para apoderarse de Venezuela, el dictador difunto llegó a la presidencia de la mano del Foro de Sao Paulo con una agenda oculta, la tribuna, un país rico con una sociedad hastiada de los errores cometidos por la clase política gobernante, lo que le ofreció un caldo de cultivo ideal para sembrar el comunismo, una ideología fracasada donde se  implemento y que hoy esta  reafirmado en la Venezuela en ruinas que aspiran continuar saqueando.
El difunto dictador y su ignorante heredero han convertido a Venezuela en un país donde sus habitantes parecen  turistas empobrecidos, mientras los rusos, los chinos y los cubanos se pasean como los dueños de su territorio y sus recursos, quince años han  bastado para que la ineptitud, la ignorancia, la falta de nacionalismo y la corrupción  convirtieran un país rico, en un país hipotecado, inseguro para la inversión extranjera y para la vida de sus ciudadanos, con reservas internacionales minimizadas y al borde de la banca rota.
Ante el descalabro inminente del esperpéntico régimen, el ilegitimo pinocho le miente al país, usa  el lenguaje heredado de quien se le aparece como pajarito y  habla de su amor por el soberano,  mientras amenaza a la oposición, a los diezmados medios de comunicación para que no informen sobre la precaria situación que enfrenta el país, reflejada en enormes colas que a los venezolanos les ha obligado a hacer frente a las puertas de supermercados, para  tener acceso a algún producto de la cesta básica que hace su aparición en el local comercial como si se tratara de una estrella de cine.
El ilegitimo tiene en su curriculum el hecho de haber sido “diplomático”, un  canciller que no aprendió de diplomacia,  su más reciente y lastimosa decisión fue expulsar tres diplomáticos estadounidenses  a quienes acuso  de reunirse con opositores para realizar supuestas actividades de conspiración, lo que no puede hacer el canciller es expulsar a millones de venezolanos que a diario conspiran contra la deplorable situación en la que ha sumergido al país.
Venezuela está gangrenada debido a la banda de delincuentes nacionales y extranjeros que como vampiros pretenden extraer de sus bóvedas y subsuelo la última gota de petróleo, la ultima onza de oro, y el ultimo dólar que los enriquezca más, para eso continuara culpando de su estrepitoso fracaso a  la derecha fascista internacional, la oposición apátrida, el empresariado burgués, al maldito imperio, los judíos, la oligarquía, las iguanas y a los rabipelaos. 
El colombiano jefe de la banda,  ha decidido pasar a una nueva etapa a partir del 5 de Octubre del presente año  para defender la revolución, (la revolución encarnada por El, por ladrones, narcotraficantes y todo aquel que no esté dispuesto a pagar por sus delitos), en esta  nueva etapa convoco a los miembros del PSUV, a los asalariados grupos violentos, a la mal llamada milicia bolivariana y a la Fuerza Armada Nacional.
Cnel (GN) Antonio SempruN
@antoniosemprun