sábado, 14 de mayo de 2016

Venezuela está gritando libertad



Con la aprobación del Estado de Excepción y de Emergencia Económica Nicolás Maduro vuelve a las andadas, no hay nada nuevo en la extensión del decreto que no este ocurriendo en el país y que no sea la flagrante manipulación de la Constitución  Nacional por este régimen corrupto y la aparición en el escenario político y social de la figura del Referendo Revocatorio, escenario sobre el que cerraron fila todos los sectores que se rejuntan bajo la protección del paragua que les brinda impunidad a los delitos que han cometido y continúan cometiendo.

La situación que vive Venezuela promovida por verdugos embriagados de poder tiene un objetivo claro, continuar engordando sus cuentas bancarias en bancos extranjeros y  terminar de saquear el erario publico sin importarles que los venezolanos mueran de mengua y que el mundo nos conozca por la imágenes en las que se ve a un grupo de personas peleándose en una cola para comprar comida, o a una turba saqueando un camión sin saber que hay en su interior.

El pueblo venezolano no merece vivir lo que está viendo, es un pueblo noble de convicción democrática, un pueblo de fe al que no le dejaron otra opción que salir a la calle a luchar, a protestar en busca de una salida al maremágnum en el que lo tiene metido una camarilla de malandros dispuestos a cerrarle todas las vías que lo lleven a volver a ser dueños de su propio destino, los venezolanos no merecemos el gobierno que tenemos porque es un gobierno conformado por delincuentes criminales que gobiernan como reyes sin corona negados a rendir cuentas ante la justicia.

Hay algo que no tiene vuelta atrás en la lucha entre un régimen ineficiente y corrupto y la desesperación  de quienes ya no tienen nada que perder, es la convicción de que hay que estar en la calle porque es la única salida y eso tiene que entenderlo quienes recibieron el mandato de representarlos y defenderlos. “El pueblo es la voz de Dios, y cuando Dios manda hasta el diablo debe obedecer”.

Ninguna sociedad que tenga satisfechas sus necesidades básicas ve en la calle el único espacio para expresar su inconformidad ante la violación de sus derechos fundamentales, eso ocurre cuando las “autoridades” que tienen la obligación de protegerla y brindarle paz y tranquilidad incumplen ese mandato constitucional a cambio de beneficios e intereses personales.

Las ultimas demostraciones dadas por el pueblo venezolano cuando tomaron las  calles exigiendo que se respeten sus derechos, y la represión de la que ha sido objeto por parte del moribundo régimen presagia un desenlace en el que la fuerza del pueblo unido se llevara por delante a la camarilla de delincuentes que lo irrespeta y a quienes no han querido escuchar sus gritos de libertad.

Cnel (GN) Antonio Semprún
@antoniosemprún
coronelantoniosemprún.blogspot.com