lunes, 4 de junio de 2012

A los Venezolanos que luchan para que no se expropie el país

No pidas al vecino que defienda tú casa, cuando te sientas en la acera del frente a mirar como la roban.  - Antonio Semprun

Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira

Han pasado casi catorce años desde que los venezolanos cansados de los errores y desaciertos de los partidos tradicionales, pusieron a Venezuela en las manos del mismo militar que llevó a la muerte a centenares de inocentes ciudadanos cuando insurgió de manera sangrienta contra un gobierno legítimamente constituido. Llas razones que esgrimió para usar contra el pueblo venezolano las armas que la República le confió para su defensa, hoy se han potenciado exponencialmente.

Razones que sólo eran el maquillaje que ocultaba la verdadera agenda que manejaba para alcanzar el poder que le fué arisco por la vida de la violencia,  la agenda estaba escrita por protagonistas foráneos que en el pasado lucharon contra los gobiernos democráticos de la época para convertir a Venezuela  en una sucursal de su enclave dictatorial.
El mandatario, llegó al poder por la vía constitucional debido a la confianza que el noble pueblo venezolano depositó en El,  un pueblo que le compró las falsas  promesas que hizo en su recorrido por el país, un pueblo que tenía necesidad de creer en alguien que les mejorara la calidad de vida, que les cambiara el futuro que tanto ofrecieron cambiarle los gobiernos anteriores y no les cumplieron.

Ante esa inmensa insatisfacción, decepción y necesidad los venezolanos depositaron su confianza en quien los traicionaría, porque tenía muy claro su objetivo y el de su mentor caribeño, alcanzar el poder para destruir, engañar y humillar al pueblo que lo encumbró en el poder, una vez en posesión legítima de ese poder empezó a desmontar un país democrático para convertirlo en un país autocrático donde la única autoridad que se impone es la que se le ocurre a quien se convirtió en dictador.

 La lucha por adecentar el país será ardua, corresponde a cada venezolano hacer su aporte porque la lucha apenas comienza el 7 de Octubre, cuando después de obtener y defender lo que ganamos de manera legitima venciendo obstáculos que el régimen usó para impedirlo, entendamos que tenemos que reconstruir un país al que dejaron en la miseria, en manos de la delincuencia, con acreedores extranjeros que querrán reclamar la parte del botín que les entregaron a cambio de empréstitos e hipotecas.

Después de catorce años el país que los venezolanos le entregaron a quien resultó ser un enorme fiasco para que lo rescatara de la corrupción, de la inseguridad y lo enrumbara por la senda del progreso es un país donde sus ciudadanos viven sometidos a brutales racionamientos eléctricos. Lla vialidad es una gran luna de enormes cráteres que engullen camiones de basura, la inseguridad enluta centenares de hogares venezolanos cada día, las huelgas de gremios y profesionales que reclaman sus derechos están a la orden del día, el desabastecimiento y la carencia de insumos de primera necesidad son invitados de honor en abastos y supermercados y hospitales, el respeto por los derechos humanos de los venezolanos se convirtieron en letra muerta, la propiedad privada es un blanco en el que acierta el dedo índice del dictador.

El rescate de Venezuela es un compromiso y una deuda que cada venezolano tiene con el país, nadie defenderá una lucha que no le pertenece, la lucha por Venezuela pertenece a cada venezolanos que tiene que entender que si no defendemos lo que es nuestro, si no luchamos por ser dueños de nuestro propio futuro. Chávez, su sustituto y sus acólitos decidirán lo que quieren para Venezuela y su pueblo.               

Un cambio imprescindible

Venezuela es un país del que Chávez hizo un barquito de papel y lo lanzó a navegar en aguas negras, lleva casi catorce años navegando, encallando en aguas poco profundas contaminadas de estiércol, en la cabina de mando una tripulación inepta comandada por un ególatra megalómano que cede el mando por conveniencia a grupos de los que puede beneficiarse y beneficiar su trasnochado proyecto.
En las barriadas venezolanas manda la pandilla que a más integrantes de la pandilla rival asesinen, en las hacinadas cárceles venezolanas mandan los Pranes (Presos Resteados Asesinos Natos), en las grandes ciudades manda la inseguridad que asesina sin misericordia a los venezolanos, en la frontera venezolana manda la FARC, en las notarias y registros del país mandan los cubanos y en Venezuela manda Fidel Castro.
Estas son razones de mucho peso por las que se hace imprescindible ejecutar el cambio que le devuelva a Venezuela su autonomía, su independencia, su identidad, su libertad, su SOBERANIA.