jueves, 8 de marzo de 2012

Venezuela, Capital La Habana / Caracas

Para los pueblos la historia tiene una extraña, injusta ó aleccionadora manera de escribirse, no imaginaron los vampiros ancianos caribeños que lo que pretendieron llevar a cabo por Machurucuto en los años 1967 seria cristalizada años después por la aptitud entreguista y apátrida de un traidor nacido en la tierra de Bolívar. Aquellas añejas pero latentes pretensiones de los hoy sanguinarios octogenarios se quedaron enanas con lo que han logrado sin el más mínimo esfuerzo y sin disparar un tiro.

Cuba es el único país del mundo que tiene dos presidentes uno que emite las directrices que deben cumplirse y otro que obedece ciegamente a pesar de ser el mandatario de un rico y poderoso país. Hasta la isla viajan presurosos presidentes de países probadamente democráticos con la intención de firmar acuerdos bilaterales entre sus países y Venezuela, acuerdos que serán plasmados en papeles membretados con la inscripción República Bolivariana de Venezuela, en los que seguramente se leerá, firmado en el Palacio de Miraflores en Caracas a los ''equis'' días de 2012, acto que se constituirá irrito como la mayoría de las acciones, decisiones tomadas y ordenadas por el jefe de la revolución ''Bonita''.

La permanencia del Chávez en Cuba, cuidado y atendido por su barbudo huésped, zorro viejo experto en el arte de engañar y estafar debe ser motivo de una profunda preocupación para todos los venezolanos tomando en cuenta que las reservas de oro de Venezuela se encuentran a discreción de la orden que pueda emitir el encantado traidor venezolano. Una vez en un discurso invitó a los pueblos a no vestirse y a no comer porque lo que importaba era la revolución. Que podría importarle entonces heredarle las reservas a su padre y mentor político y que el país se hunda en el desastre si es muy probable que ya no tenga que rendirle cuentas a ningún ser terrenal.

Por Venezuela