Ningún sacrificio es en vano cuando en el intento quedan hilos que se pueden fortalecer para alcanzar el objetivo deseado.
- Antonio Semprun -
Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira
Ahí viene el coco, esa era la manera más efectiva en que nuestros padres y abuelos lograban meternos miedo para ellos obtener sus objetivos que no eran más que conseguir que hiciéramos algo en lo que éramos reacios. Eso es lo que ha logrado la oposición en Venezuela con la creación de la tarjeta que podría ser única o unitaria, desde el Mandatario hasta su más subalterno servidor están hablando de este importante paso democrático, cada uno de ellos le agrega su toque personal que va desde la desunión hasta las riñas internas en la Mesa de la Unidad y esto es comprensible en un régimen que desconoce algo que se llama pluralidad democrática, que no tiene nada que ver con la omnipresencia de un todopoderoso comandante presidente donde El, es el único candidato, es allí donde está la inmensa diferencia entre democracia y autocracia.
Es alentador ver que después de doce años se está encontrando el camino que nos llevara a reivindicar el camino de desaciertos que hasta ahora se había recorrido. Hoy más que nunca se debe ser cuidadoso en los pasos que se van a dar, la estrategia a seguir debe estar a la altura del objetivo a alcanzar. Se debe tener muy presente contra quien o quienes se va a luchar y lo que está en juego que no es otra cosa sino NUESTRO PAIS, Venezuela.
Dimos un paso equivocado al fijar la fecha de la elecciones para elegir el candidato único, en adelante la estrategia debe ser metódica y cuidadosa porque son muchos los obstáculos que nos pondrán en el camino, en este momento la virtud de ser demócratas no debe convertirse en un factor de división hay un sólo camino a seguir la UNIDAD OBLIGADA.
En este momento a los venezolanos no les interesa quien es la primera fuerza política del país, ya la conocemos la primera fuerza política, administrativa moral es y debe ser Venezuela y la unidad debe ser el resultado de un mensaje real, consistente en donde los partidos políticos no piensen que sacrificarían su tarjeta política para ir en una tarjeta única o unitaria.
El egoísmo personal o político seria un aliado importante para el régimen, en estos últimos trece años la oposición debe haber aprendido, que contra este tipo de regímenes no se puede luchar solo, hay que unirse para rescatar el sistema democrático que les permitirá mas adelante luchar por sus lógicas apetencias políticas y el orgullo de ser la primera fuerza política del país, primero hay que cambiar el sistema, de no ser así no habrá país en el que aspirar ni de que sentirse orgullosos de nada.
Venezuela no es Caracas, Valencia, Maracaibo o Barquisimeto es todas las poblaciones, las más lejanas del norte del sur del oriente y el occidente del país a donde debe llegar el mensaje de unidad, en donde se deben crear equipos robustos de defensa de la ya ruidosa decisición popular ''Rescatar a Venezuela'' esos equipos deben saber que hacer ante cualquier situación que se presente, deben tener conocimiento pleno sobre la tarjeta única o unitaria, no hay tiempo para volver a equivocarse.
