Venezuela Una Sociedad de Víctimas
"La amenaza es el arma a la que echan mano los funcionarios que con sus acciones perdieron el respeto y la confianza de quienes lo eligieron"
Antonio Semprun
Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira
Quien puede dudar que en Venezuela un dictador
se adueñó del poder y lo oculta detrás de un raquítico marco de democracia, lo
usa como plastilina para amoldar a su conveniencia leyes, conciencias y
desaciertos. Venezuela era un país donde la responsabilidad de administrarlo se
alternaba cada cinco años. Chávez, está imponiendo su voluntad a los
venezolanos desde hace más de una década y pretende continuar haciéndolo seis
años más.
¿En cuál país democrático de América Latina, los periodos presidenciales
se han extendido por más de dos quinquenios incluyendo la reelección?, a no ser
en aquellos que se han contagiado con el virus de una dictadura disfrazada para
poder ejercer un gobierno fuera de las leyes constitutivas ó para crearla de
manera que le permita gobernar a sus anchas protegida por la impunidad que se
propicia.
Han transcurrido catorce años
tiempo suficiente para que un gobierno se transforme en dictadura y se
convierta en pasado, hecho que no le permite exculparse de sus desaciertos para
achacárselos al pasado. La revolución ''bonita'' que inventó Chávez, y su tutor
político caribeño para apoderarse del poder ha destruido a Venezuela, debido a
que ha sido un permanente enroque de incapacidad e ineptitud.
Venezuela, se ha convertido en el
país de un comerciante que compra y alquila conciencias, estrategia que le ha
funcionado a Chávez, quien maneja una chequera mil millonaria sin ningún
control, que le permite con dinero ajeno, dinero de los venezolanos regalarlo a
manos llenas a un pequeño número de súbditos de su régimen para mantenerlos
arrodillados y a países extranjeros que pagan las dadivas mirando hacia a otro
lado para ignorar lo que pasa en el país.
En los escaparates ó en los closets de los más recalcitrantes
''chavistas'' los que se desgarran las vestiduras por el amo y su esperpéntico
proyecto, espera un gancho vacio donde colgaran el disfraz de color rojo en el
que se meten cada día, los funcionarios ''incondicionales'' del régimen no
vinieron de otra galaxia, son venezolanos que antes también se desgarraban la
vestidura por otro amo de turno y otro color, en ese gancho vacio serán muchos
los camaleónicos personajes que colgarán el disfraz rojo esperando la
campanadas de cambio para volver a mimetizarse.
Chávez, convirtió a Venezuela en
una sociedad de victimas, donde cada día además de la odisea que representa el
heroico hecho de sobrevivir a la delincuencia desbordada, no se escapan los
venezolanos de un apagón que dura horas, aceptar el no encontrar un producto de
primera necesidad, meterse la mano al bolsillo para cubrir la carencia de
insumos de hospital, vivir hacinados en refugios debido a la larga espera de
una solución habitacional que le fue prometida.
La victimas de Chávez y su
proyecto, son los venezolanos quienes un día decidieron con el poder del voto
otorgarle el derecho a gobernar el país para que lo enrumbara por el camino del
progreso, no le fueron suficiente cinco años, han transcurrido catorce y hoy
Venezuela es una triste sombra de lo que era cuando tomó el poder, pretende
seguir engañando al pueblo ofreciendo, lo ya que ofreció y fue incapaz de
cumplir, ahora cual guapetón de barrio amenaza a quien una vez se equivoco y lo
encumbró en el poder.