Una  Autopista al Desastre

Nada es más peligros para un pueblo libre, que dejarse golpear contra la pared del comunismo.

                                                     Antonio Semprun

Si un estado quiere ver como sus empresas más solidas y productivas  lentamente se destruyen, como sus ciudadanos con el paso del tiempo sufren la metamorfosis que los lleva a la indigencia,  como de la noche a la mañana surge una elitesca clase social, como se hace leña del éxito ajeno para hacer creer, que lo que fue logrado por unos pocos  con esfuerzo, sacrificio y trabajo ahora es de todos vendiéndoles el espejismo que el poder  es de la clase trabajadora,  ese estado debe transitar por una peligrosa autopista.

Cuando esa terrible realidad se materializa ante los ojos de una sociedad,  el estado  transita el camino de un movimiento político “el Comunismo”,  movimiento que dependiendo de la iniciativa de quien pretenda implementarlo puede camuflarlo con otro nombre que finalice en “ismo” al que   le puede agregar un tiempo XXI.

Esta es la definición del responsable de la desgracia de muchos pueblos.

“El   comunismo es un movimiento político que promueve la formación de una sociedad sin clases  sociales, donde los medios de producción sean de propiedad común. Esto implica que la propiedad privada de dichos medios no existiría, lo que llevaría el poder  a la clase trabajadora.”

Quienes  promueven e implementan “el comunismo”  viven como dioses en el Olimpo.

Cnel (GN) Antonio Semprun

@antoniosemprun