lunes, 12 de diciembre de 2011

''Los Presidentes y el Dictador que Vinieron a Buscar sus Aguinaldos''

Es muy fácil hacerse ver generoso cuando se utiliza el dinero ajeno.
- Antonio Semprun -

Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira

La recién finalizada cumbre que fuera bautizada con un nombre plagiado al ex presidente Jaime Lusinchi que el pasado fin de semana recibiera treinta y un mandatarios y un dictador, terminó maquillada con una gruesa capa de cinismo. Alrededor de una gran mesa se sentaron los presidentes de países democráticos con Raúl Castro y el títere de Fidel Castro, en el recién creado organismo fué "Aprobada la Declaración de Caracas", el Plan de Acción 2012, un estatuto de procedimientos y una declaración especial sobre "la defensa de la democracia y el orden constitucional" para actuar en caso de ruptura democrática en cualquier país de la región. Quiso el anfitrión evitar actuaciones como aquella llevada a cabo un 4 de febrero de 1992 en la que fué protagonista, donde murieron más de un centenar de inocentes venezolanos por el afán de romper el hilo constitucional y tomar el poder por la fuerza. La sede de la próxima cumbre donde se continuará hablando de defensa de la democracia y el orden constitucional" se realizará en Cuba cuna de las dictaduras.

Cuba y Venezuela, dos de los socios de la CELAC, uno representante de la dictadura más antigua y sanguinaria de la región, el otro violador de los Derechos Humanos y responsable de conducir al país a la miseria y al atraso, trabajaran en los fundamentos que servirán de columna vertebral de la CELAC, fundamentos sobre los que se regirán el resto de miembros del recién nacido organismo. Con la declaración especial sobre "la defensa de la democracia y el orden constitucional" los treinta y un presidentes presentes en el acto se convirtieron en cómplices de los verdugos de la democracia al sentarse en la misma mesa.

Quiso el dictador venezolano hacer de la cumbre un nuevo traje a la medida como ha hecho con la Constitución Nacional de Venezuela y el conjunto de leyes que de manera irrita ha hecho aprobar. En la reunión de Fuerte Tiuna donde se mantuvo a los asistentes como peligrosos pacientes psiquiátricos no se habló de la necesidad de celebrar elecciones transparentes, no se mencionó la importancia de establecer mecanismos que garanticen la alternabilidad del poder, no se hizo mención sobre la importancia que representa la separación e independencia de los poderes del estado como reflejo de un verdadero sistema democrático.

A su llegada al aeropuerto a los asistentes les colocaron gríngolas, no se enteraron que los venezolanos ahora se matan por comprar un kilo de carne cuando ésta hace su aparición en las neveras de los supermercados, no se enteraron que mientras estaban reunidos alrededor de una enorme mesa rectangular dentro del lugar más seguro de Venezuela en las calles de ese mismo país cuarenta y siete venezolanos fueron asesinados por la inseguridad reinante en la ciudad más peligrosa del mundo, no se desplazaron por calles donde enormes huecos engullen camiones de basura ni sus sesiones de trabajo fueron interrumpidas por un apagón eléctrico.

En el seguro recinto donde nacía la CELAC, el presidente chileno señalaba "Tenemos una tremenda oportunidad de lograr aquello que nuestros padres, abuelos y quienes nos antecedieron nunca lograron", haciendo referencia a la superación de la pobreza. Desconoce el presidente chileno que en Venezuela después de trece años de atraso existen dos maneras de superar la pobreza la que usan los niños cuando obligados por las circunstancias se gradúan de artistas de circo en las esquinas y los semáforos de las ciudades venezolanas y la que usan quienes pertenecen al clan de los gánsteres del dictador anfitrión quienes de la noche a la mañana se constituyeron en una nueva clase social mil millonaria.

Llegaron los invitados pensando en las regalías de las que serian beneficiarios, todos conocen lo irresponsable que el ''generoso'' dictador puede ser con el dinero de los venezolanos, están consientes que la creación de este nuevo organismo será un experimento más que quedará en el membrete de los papeles del 4 y 5 de diciembre de 2011 como han quedado las promesas de construcción de refinerías de petróleo alrededor del mundo que hoy sólo son esqueletos en la cabeza del megalómano venezolano, otro elefante blanco en el que se derrochó miles de dólares para atender a los invitados. El presidente colombiano Juan Manuel Santos dejó caer sobre los presentes una profecía de lo que será el futuro de la CELAC cuando ante la pretensión del ELN y las FARC, de que el neonato organismo interviniera en el conflicto armado expresó ''Por ahora la mejor forma de ayuda es no hacer nada''.

Sesenta y cuatro bolsillos, treinta y dos portafolios, treinta y un presidentes y un dictador, todos reunidos en Venezuela en época decembrina, época en la que miles de venezolanos tendrán que hacer largas colas para encontrar y comprar los ingredientes que les permitan tener una modesta cena de navidad después de estirar sus presupuestos. Los huéspedes del dictador regresaron a sus países desconociendo la verdadera Venezuela en la que sobreviven sus habitantes, partieron con la agradable sensación que les brindó la generosidad de un tonto útil a quien no le importa si los venezolanos tienen ó no dinero para hacerle un regalo a sus hijos en esta navidad, para El, lo importante era que sus invitados se fueran contentos y estos regresaron a la tranquilidad de sus lujosos destinos con la certeza que después de la visita se abultaron aún más sus cuentas personales.