domingo, 27 de marzo de 2016

Venezuela zona roja


No es normal que en un país que no está involucrado en una confrontación bélica sus habitantes vivan entre apagones de luz, bebiendo aguas contaminadas, esperando que  aparezcan alimentos para correr despavoridos a comprarlos  mientras  en esa carrera se pierda alguna vida en la estampida que produce la aparición.

En ese mismo país abunda la escasez, abunda la muerte debido a  la inseguridad desbordada,  se mueren los venezolanos sin importar su edad porque desaparecieron las medicinas y en los hospitales no hay equipos,  los que existen no funcionan  porque alguien se robo los reales.

Si  Venezuela no está en guerra, porque no hay medicinas, porque se tiene que marcar a los venezolanos en sus brazos  para impedir que repitan la compra de alimentos, porque tienen que esperar el día en el que termina el numero de su cedula de identidad para ir a los supermercados, porque tienen que hacer colas frente a las morgues  los únicos lugares donde hay abundancia.

A quien le duele el dolor del venezolano de a pie, le duele al Presidente de la Asamblea Nacional que ve en el rio revuelto una oportunidad de banda tricolor, son elocuentes las fotos que muestran a una futura familia presidencial, le duele a la mayoría de los nuevos ediles apabullados por la veteranía y la condición de zorro de viejo de quienes tras bastidores han negociado y entregado el país y la tranquilidad de sus ciudadanos a cambio de beneficios personales y partidistas,  han transcurrido más de tres meses desde su toma de posesión y se han encontrado con una putrefacta pared jurídica el TSJ, que los ha maniatado mientras un pueblo dispuesto a luchar por sus derechos continua viviendo su calvario.

La tragedia que vive el país tiene responsables visibles y camuflados, los que desde hace más de una década  saquean a  Venezuela y tratan  a sus ciudadanos como  peones y quienes le hacen el juego a los saqueadores que los señalan con un dedo mientras tres los condenan.

El mesianismo tiene enfermo al pueblo venezolano, el emotivo discurso del cantante  Nacho en la Asamblea Nacional el día de la Juventud motivo expresiones como está, “Venezuela ha parido un nuevo líder”,  está condición mesiánica es conocida por “tirios y troyanos” lo que nos hace dependientes de un tercero que resuelva el problema que nos tiene esclavos del oficialismo y  la “oposición”.

Venezuela dejara de ser la zona roja en la que delincuentes y  cómplices la han convertido cuando sus víctimas que son las que viven en carne propia la desgracia que les impone un régimen hambreador y asesino  despierten y conviertan la calle en su hábitat natural hasta que los rateros que la humillan sean expulsados del poder.

Cnel (GN) Antonio Semprun
@antoniosemprun
Coronelantoniosemprun.blogspot.com