sábado, 5 de noviembre de 2016

Palo, palo y palo


Nadie puede decir después de transcurridos diecisiete años de humillación e irrespeto que el pueblo venezolano es un pueblo cobarde o que merece la podredumbre de gobierno que hoy lo dirige, debió transcurrir más de una década para que nos diéramos cuenta de lo que había ocurrido ya hacia algunos años, que la pirámide se había invertido, que quienes desean vivir en libertad son mayoría.

La democracia además de lo que representa como sistema político, es para las sociedades una necesidad, una responsabilidad que no tiene fecha de caducidad así pequeños grupos de sátrapas se empeñen en usarla como paraban para disfrazar una dictadura.

Para las dictaduras el poder es como la carroña para las aves de rapiña pelearan con garras y picotazos para no soltarla porque de ella se alimentan, en el caso de los dictadores el poder lo usan para delinquir y negociar, no es una opción soltarlo, por eso maniobran, engañan y manipulan cualquier acción que conduzca al sistema que destruyen.

El dialogo en el que es mediador de buena fe el Vaticano, ha sido una ruleta rusa que dio unas bocanadas de oxigeno a la dictadura de Nicolás Maduro, los títeres de los Castro en Venezuela jamás transitaran la vía democrática, no se va al campo a perder una batalla y menos cuando la correlación de fuerza es diez a tres, donde ese tres pinta rojo no por ser el enemigo, la dictadura sabe que en el camino por el rescate de la democracia perderá todo a lo que se enfrente, por eso no habrá Referendo Revocatorio.

Sin  embargo la terrible situación que viven los venezolanos no aguanta más, ni las pretensiones de Nicolás Maduro de continuar en el poder, ni el “poner la otra mejilla” por parte de quienes tienen que alimentarse de los desperdicios de comida que encuentran en bolsas de basura para no morir de hambre y de quienes a diario ven morir a sus hijos y a otros seres queridos porque no encuentran medicinas.

El noble pueblo de Venezuela lleva diecisiete años llevando palo, palo y palo, ha cumplido contra viento y marea cuando le han llamado a llenar las calles, ha sido paciente, ha confiado, se ha sacrificado, el venidero once de Noviembre la dictadura debería “cumplir” lo acordado en las mesas de dialogo, de no hacerlo quedara en evidencia dos cosas, la condición totalitarista del régimen  o la condición democrática de la oposición, desde ese momento cualquier acción para restituir la democracia en Venezuela estará justificada.

Cnel (GN) Antonio Semprun
@antoniosemprun
coronelantoniosemprun.blogspot.com