La
historia de los pueblo está repleta de secretos que tienen que ver con sus
protagonistas y la lucha de estos por dinero y poder, Venezuela no está exenta de ésta condición sobre todo en los últimos dieciséis años en los
que el país ha sido epicentro de
intrigas, traiciones y envidias.
La
destructiva “revolución” que lidero Hugo Chavez hasta el momento de su muerte no necesito de un salvavidas, en la política como en cualquier otra instancia
suponer la ocurrencia de un hecho implica
el riesgo de equivocarse, pero suponer
que en la era Chavez en la que la revolución lucia todopoderosa el
regreso de Manuel Rosales al país era posible hubiese sido una equivocación.
Después
de seis años de exilio, el regreso de sobre quien pesan once investigaciones
que van desde enriquecimiento ilícito hasta el presunto delito de peculado propio e
impropio plantea dos interrogantes, que margen de maniobra dará la Mesa de la
Unidad (MUD) a Manuel Rosales quien en las elecciones presidenciales del año 2006
entrego el país antes de que cerrara la última mesa de votación y porque conociendo el enorme peso que representan esas acusaciones
judiciales regresa al país donde la
justicia es impartida por una banda de
delincuentes con toga y birrete que sin una prueba en contra de Leopoldo López lo condeno a catorce años y seis meses de
prisión.
De
quien es realmente la mano que está detrás
de esa jugada, quien trajo a Manuel Rosales a Venezuela, porque no es lo mismo traer que
regresar y ante la situación de desmoronamiento que vive el régimen y su
partido político PSUV debido al dantesco escenario de miseria, inseguridad,
desabastecimiento y corrupción, necesitan un salvavidas, por eso no es
descabellado pensar que quienes han saqueado el erario público hayan decidido traer para convertir en caballo de Troya a quien en el pasado no estuvo a la altura del
compromiso histórico que el país le demando en su momento.
Cnel (GN) Antonio Semprun
@antoniosemprun
Coronelantoniosemprun.blogspot.com