La libertad es el derecho por el que un ser humano es capaz de dar la vida y cualquier esfuerzo es pequeño cuando se trata de alcanzarla.- Antonio Semprun -
Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira
El 19 de Abril de 1810 un movimiento popular dió inicio a la lucha por la independencia de Venezuela. Aquel movimiento se originó por el rechazo de los caraqueños al nuevo gobernador Vicente Emparan, era un jueves santo y mientras el gobernador se dirigía a misa un grupo de hombres y mujeres de la de la aristocracia y la burguesía criolla y miembros del Cabildo de Caracas desconocieron al entonces Capitán General de Venezuela. Ese día el gobernador preguntó al pueblo si querían que El continuara mandando y el Presbítero José Cortez de Madariaga le hizo signos a la multitud para que respondieran que ''NO'' , aquel gobernador respondió que El tampoco quería el mando, renunció y se marchó a España.
Son diferentes las épocas y sobre todo los actores si se pretende comparar a Emparan con un dictador pero se perseguía el mismo preciado derecho a la libertad. Reescribamos la historia este 26 de septiembre de 2010, los venezolanos de hoy no somos diferentes a los venezolanos que se reunieron aquel jueves santo en la Plaza Mayor de Caracas. Hoy más que nunca está vigente el compromiso de cada uno de los venezolanos con Venezuela, con el futuro, con la libertad, con la democracia pero sobre todo con nosotros mismos porque nos corresponde ser los protagonistas y arquitectos de lo que queremos y de lo que merecemos.
Llegó el momento de comenzar a desmontar un régimen que nos está robando la esperanza y el futuro. El 26 de Septiembre hagamos de los centros de votación nuestro punto de reunión y una vez en la intimidad que nos da una humilde cortina de plástico cuando depositemos nuestra decisión de ser libres, debemos prepararnos para defender nuestra voluntad porque sólo Dios detiene a un pueblo que se ha puesto en marcha en busca de su libertad.
Abramos con nuestra decisión la puerta del regreso a los hijos de Venezuela que obligaron a irse por el sólo hecho de pensar diferente. Permitamos que el reencuentro de los hijos, de los hermanos, de los esposos, de los amigos comience a ser posible. Demos el 26 de Septiembre el primer paso para que comience a hacerse justicia con quienes hoy están privados de libertad injustamente, hagamos posible con nuestra convicción de votar masivamente y que en los rostros de los venezolanos se refleje la alegría infinita del reencuentro.
A los hijos de la patria se les aleja, se les corre, se les obliga a partir, se les saca de Venezuela pero Venezuela nunca sale del corazón de sus hijos. Unidos y perseverantes comenzaremos a ver despuntar el hermoso sol de la libertad. Démonos la oportunidad de demostrarnos lo poderosos que podemos ser cuando marchamos juntos en busca de un fin común.
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