Las autoridades que usan el poder que les otorgó el mandato popular para convertirse en delincuentes, deben ser perseguidas y castigadas de manera implacable por la ley. - Antonio Semprun
Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira
Ni lo que representa el toque de silencio para la vida del dictador venezolano hace que disminuya en El la enfermiza admiración que siente por su barbudo dios caribeño a quien le ha entregado no sólo las riquezas, los secretos de estado y la soberanía nacional sino la paz y la tranquilidad de la sociedad venezolana, quiso potenciar esa admiración para que le diera como premio el afecto de Fidel, aún cuando se niega a reconocer que el octogenario dictador no siente afecto por seres humanos, sólo lo siente por los intereses que garanticen la sobrevivencia de su proyecto destructor, el que el mandatario venezolano quiso imitar y sólo trajo como nefastas consecuencias como el hecho que Venezuela sea hoy un estado cubierto de polvo blanco.
Chávez, convirtió al país en un paraíso para el narcotráfico, como acertadamente lo calificara el señor Alvaro Uribe, un paraíso donde funcionarios del régimen civiles y militares se reúnen bajo un manto de impunidad y complicidad que les permite manejar al margen de la ley pero con conocimiento del presidente de Venezuela acciones delictivas y asociaciones con delincuentes, que les generan a los funcionarios mil millonarias ganancias a costa de la tranquilidad del país.
El mandatario venezolano es cómplice del derramamiento de sangre no sólo de venezolanos si no de ciudadanos colombianos, porque ha hecho a Venezuela un salón VIP, donde se sientan cabecillas de las FARC, para verificar por televisión, muy lejos del alcance de la justicia colombiana el éxito de sus actos terroristas en contra de instalaciones y funcionarios del hermano país colombiano, desde ese salón pueden ver al mismo tiempo la inmensa tristeza y desesperación que estas acciones ocasionan a sus pobladores.
Chávez odia la misma la burguesía que odia Fidel, la que se ha levantado con trabajo y esfuerzo por generaciones, la que no se arrodilla porque lo habido ha sido producto del sacrificio familiar, la burguesía que ama Chávez y Fidel, es la que se les arrodilla, la que surge de la noche a la mañana, producto de negocios turbios, de negocios sin más esfuerzos que el trafico y el control de drogas que convierte a un individuo servil sin principios en un potentado ''empresario"
No existe diferencia entre dictadura y terrorismo, manejan los mismos métodos, se rigen por la inmoralidad, el engaño, el robo y la ambición de poder para conseguir sus metas a costa de la salud, la paz y la tranquilidad de un pueblo ó una sociedad. Chávez, es en tal sentido un terrorista vestido de dictador, que ha corrompido las instituciones del estado venezolano, para que nazca y crezca en Venezuela un estado forajido que protege entre sus fronteras a narcotraficantes nacionales y delincuentes internacionales.
La creación del comando antigolpe, la declaración del Ministro de la Defensa en la que expresa de manera errónea la existencia de un matrimonio entre las Fuerzas Armadas y el proyecto de Chávez, son gritos de preocupación para mantenerse en el poder que le brinda impunidad al gran cartel de la droga en el que hoy esta convertido el país, en el que sus más importantes capos fueron puestos al descubierto por las acusaciones de dos ex-magistrados que pertenecieron a la podredumbre rojita.
El comando tricolor representado por su incansable abanderado debe implementar acciones y reacciones eficaces para que la mayoría de los venezolanos no experimenten una sensación de indefensión y decepción ante los atropellos y las jugadas calculadas para este fin que pondrán en marcha los narcotraficantes que pretenden mantener el poder y controlar el narco estado en el que Chávez convirtió a Venezuela.
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