Chávez, un verdugo que pide clemencia

Quien promueve la lastima para propiciar caos y muerte es un engendro al que hay que erradicar. - Antonio Semprun

Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira

Mientras Chávez con voz histriónica le pide a Dios que le dé vida para seguir haciendo por el pueblo y la patria venezolana se reúne en la Habana con Raúl Castro y generales venezolanos para decidir quién de su entorno es la marioneta que llena los requisitos exigidos por los octogenarios dictadores Castro para que les garantice la sobrevivencia de la dictadura cubana a costa de cualquier precio que tengan que pagar los venezolanos, no importa si viven en la miseria o que se desangre a Venezuela.

El mandatario nacional pide por su vida al mismo tiempo que apoya el régimen sirio que les quita la vida de manera inmisericorde a sus ciudadanos, exige que cese el bloqueo a la dictadura cubana para que un dueto de ancianos sanguinarios continúe negándoles el derecho a la vida a los cubanos. Venezuela está en manos de un individuo sin moral ni principios que busca satisfacer su propio ego, de quienes lo rodean y quienes lo viven.

Una de las cosas que desea hacer por ''su pueblo'' es crear un fondo para administrar a través de entidades públicas financieras las prestaciones sociales de los trabajadores quienes deberán mostrar soportes que justifiquen cualquier solicitud de su adelanto para evitar gastos inadecuados de sus fondos, lo que implica que quedará a discreción del régimen de Chávez y sus funcionarios otorgar las prestaciones ó un adelanto de estas según las razones que exponga el trabajador. Carlos López, coordinador general de la Central Bolivariana de Trabajadores, señaló '' que el anticipo de las prestaciones deben ser para garantizar al trabajador y a su familia su seguridad social, vivienda y educación. "No puede ser para que las disfrute o para que se vaya a pasear por el mundo sólo o a dilapidar su dinero". Este ha de ser el criterio que prevalecerá para otorgarles a los trabajadores el dinero que por derecho les corresponde, una expropiación más del régimen, esta vez contra el soberano (el que manda en Venezuela.

Chávez y sus seguidores más cercanos manifiestan que su régimen es garantía de paz y tranquilidad, hablan como si estuviesen en campaña y quisieran llegar al poder por primera vez para expulsar a un gobierno incapaz que fracasó en su política de brindar seguridad a la sociedad que lo eligió. Cabria preguntarle a los representantes diplomáticos acreditados en el país y a los venezolanos si en la Venezuela actual donde desgobierna un régimen que llegó al poder hace trece años se percibe garantía y paz.

El mandatario nacional, su pequeña cúpula de generales incondicionales ylos hermanos Castro están entrampados y desesperados, proponen y analizan las opciones que les permita continuar en el poder y dar oxígeno a la revolución cubana, es aquí donde está lo delicado del momento. A los cubanos no les importa en lo más mínimo el precio que pague el pueblo venezolano para ellos lograr sus objetivos, total su isla está muy lejos de Venezuela y lo único que les importa es su sub-sistencia con ó sin Chávez.

Son momentos en los que la Mesa de la Unidad (MUD), el comando tricolor y la inmensa mayoríia de los venezolanos deben estar más unidos que nunca para salirle al paso a cualquier acción de un pequeño grupo de vende patria que pretendan llevar al país a un caos con el único propósito de mantenerse bajo una sombrilla de impunidad que les garantice su tranquilidad sin importarles la tranquilidad y la paz de la sociedad venezolana.